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Oración de navidad. Por la felicidad y la amistad de todos los pueblos

Oración de navidad. Por la felicidad y la amistad de todos los pueblos Respetar y proteger la Creación.





Cuando veo a un ser de otra raza o pueblo, sea éste negro, amarillo o rojo, no siento ni temor ni desprecio, sino amor y aprecio. Todo pueblo forma parte de la naturaleza y de la creación de Dios. Siento que Dios creó la diversidad para que ésta fuera mantenida, par que perdurara como testimonio de la riqueza de su creación.


No en vano, ademas, fueron los pueblos y sus padres en las santas escrituras plasmados en los hijos de Sem, Cam y Jafet. Su testimonio, ahí, es clara señal de lo necesario de su perdurabilidad para que la armonía creada por Dios no sea rota. Ni Sem puede ocupar el lugar reservado para Jafet, ni Jafet el de Cam. Ni aun tampoco pueden los hijos de Gómer, hijo de Jafet, ocupar el espacio de los hijos de Yawán, hijo de Jafet, haciendo desaparecer así su estirpe.


Tampoco puede ser su destino el morir en este presente, en el que impera la ceguera y la negación de Dios, asimilados en una masa informe y homogeneizadora que todo lo quiere devorar, que ya a nadie pertenece ni de nadie claramente desciende, sino contemplar el dia del juicio desde la diversidad, desde la multitud de sentires y colores Todos hijos de Adán, todos descendientes de Noé, pero definidos en el orden de lo diverso, definidos como descendientes del padre, antepasado común, de cada una de las tribus del Señor. Fue decidido que así fuera en este lugar de tránsito, así fue establecido en las Santas Escrituras, es la Palabra de Dios y como tal debe ser respetada.


Este mundo, no es mera terrenalidad a la que hay que negar para ir tras la senda de lo trascendental y de la espiritualidad de la propia persona sino un jardín multiforme y multicolor al que hay que cuidar en Dios, desde lo mas cerca de Dios que nos pueda permitir nuestra inevitable condición humana.
No es como creen algunos iluminados que, buscando al Señor en lo elevado, acaban olvidando que Él se halla sobretodo en su Creación. Debemos proteger, cuidar su obra y procurar desde nuestras posibilidades que florezca tanto como sea posible. Amar la obra del Señor es protegerla, cuidar de la Naturaleza y de todos y cada uno de los pueblos que pueblan el mundo.








Oración de navidad. Por la felicidad y la amistad de todos los pueblos – por un nuevo mundo sin extrangeros.


No existe ningún extranjero en el mundo que viva en el lugar que le pertoca.



“¡Turkia para los turcos!” – de esta antigua expresión del pueblo turco deberían aprender todos los pueblos. –“TURQUIA para los turcos”. No Kreuzberg, Agusburgo o Alemania para los turcos, sino Alemania para los alemanes, igual que Turquía para los turcos. No Francia para los argelinos, sino Francia para los franceses y Argelia para los argelinos.


Nosotros pedimos para esta noche sagrada a Dios y a todos los santos y ángeles en el cielo: Por favor, ayúdanos a hacer de este mundo un lugar mas ordenado.


Que nadie vuelva a ser extrangero, sino que vuelva encontrar de nuevo su lugar en su tierra. Que nadie se vea forzado a tener que emigrar a tierras extrañas, sino que pueda vivir cada uno en su tierra, con su pueblo, en su patria, en el lugar que le fue asignado a él y a los suyos. Que no continue el sufrimiento de los pueblos que reciben la inmigración, dónde se contempla con dolor cómo se destruyen sus sociedades, su cultura y su identidad.


La Creación no ubicó ningún pueblo falso en ningun lugar falso, ningún ser humano debe verse apartado de su pueblo, de su tierra y de su felicidad. El dolor de los migrantes desarraigados no debe continuar, así como tampoco debe continuar la agresión a la armonía y el orden de los pueblos. Las nuevas doctrinas del mesitizaje, hambrientas de sacrificar la existencia de los pueblos a su dudoso dios, atacan sin pudor alguno la Obra de Dios sobre la Tierra. La locura ya ha tenido su tiempo, debe terminar, el abuso sobre los emigrantes y sobre los pueblos que se ven asaltados debe terminar. Basta de dolor, basta de esta política demencial.


El experimento del mestizaje y de la abolición de los pueblos ya ha llegado demasiado lejos, es un experimento fracasado. Y el sentido de los experimentos fracasados en la ciencia y en la vida fue siempre el reconocerlos como falsos y, tras ello, apartarlos por falsos. Pedimos que los responsables se acuerden de ello, de apartar todo lo que es falso en lugar de hacer continuar un fracaso que solo trae dolor y malestar consigo.


Aquel que todavía crea que Dios dispuso pueblos falsos en lugares falsos, que al menos reconozca en el fracaso de los experimentos para la “mejoría” de la aparentemente falsa Obra de Dios, que este es peor que esa Naturaleza considerada por ellos como falsa.


Si todos los pueblos fueran felices, todos los seres humanos serían recibidos con alegria, como invitados. Pero si el invitado se instala y hace de la casa del anfritión su propia casa, se rompe entonces la armonía y comienza la discrepancia. Una casa no puede ser decorada de dos modos distintos a la vez, en una casa no puede haber dos dueños con distintos modos de entender lo que es el hogar. Uno tiene que bajar la cabeza y aceptar, uno tiene que sufrir en silencio y, el otro, vivir en la incomodidad de que su condición es a costa del sufrimiento del otro.


Todos debemos tener nuestro hogar, todos debemos permanecer en nuestro hogar. Si no hubiera mas extrangeros, si cada uno viviera en su lugar, entonces los invitados, turistas, estudiantes, gente de negocios, viajantes, etc... serían siempre bienvenidos como portadores de las noticias de otros lugares y de la novedad de si mismos.


Así fue una vez, y así debe volver a ser de nuevo.



Oración de Kawi Schneider, 21. 12. 2004, St. Goar


http://www.unglaublichkeiten.com/unglaublichkeiten/htmlphp2/u2_0834Gaeste.html

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